Unos meses después del anuncio, el Ayuntamiento de Madrid ya tiene una propuesta para evitar achicharrarse en la Puerta del Sol durante los meses con temperaturas más altas. Los comerciantes de la zona la han escuchado este jueves durante una reunión con la delegada de Obras y Equipamientos, responsable del proyecto de su reforma reciente.
La propuesta es la de, como ya avanzó el consistorio, colocar toldos en semicírculo a lo largo del arco norte de la plaza. Estarán sujetados por una estructura auxiliar sujeta por un lado a los nuevos bancos de granito, donde se colocarían unos mástiles de acero inoxidable, y por el otro a las fachadas de los edificios, a través de unos tensores anclados.
Toda la estructura sería desmontable, tanto los mástiles que irían colocados a través de tubos enroscados para facilitar su instalación y retirada, como los tensores, sobre los que se colocarían piezas textiles de un color claro, todavía no elegido. El consistorio no ha facilitado ninguna imagen de la posible recreación de los toldos.
La solución costaría unos 308.000 euros, tal y como detallaban los presupuestos municipales de 2024 para el distrito Centro, según ha explicado la delegada, Paloma García Romero, a representantes de la Asociación de Comerciantes de las Calles Preciados, Carmen, Arenal y Adyacentes (APRECA), en una reunión a la que también ha asistido el concejal de distrito, Carlos Segura.
La propuesta de toldos ya con el visto bueno de la Comisión Local de Patrimonio Histórico por lo que, a falta de presentar un proyecto definitivo, si tiene el visto bueno de los comerciantes podría ser instalada para llegar, tal vez, al próximo verano. La intención del Ayuntamiento de Madrid es colocarla para los meses de más calor y desmontarla una vez que bajen las temperaturas.
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