¿Qué es la Asociación Felipe II?
Fundada en 2020, la Asociación Felipe II es un punto de encuentro para gran parte de todos los comercios que se encuentran en el Barrio de Goya, Distrito de Salamanca.
Los propietarios de los diversos comercios (restaurantes, bares, tiendas de ropa, peluquerías, etc) nos unimos, no solo para ayudarnos entre nosotros, sino también para imponer un crecimiento en lo que se refiere a nuestra zona comercial, y forjar así una agrupación donde podamos progresar en conjunto y lograr un beneficio en común, tanto para las empresas, como para nuestros clientes.
Valores:
- Participar, producir y apoyar una sociedad civil responsable y accesible para toda la comunidad.
- Promover una Agrupación honesta y ordenada.
- Apoyar a nuestros socios y clientes en lo que se propongan.
- Contribuir al progreso y desarrollo de la Agrupación.
El Barrio de Goya
El barrio toma su nombre de la calle de Goya que, justo en medio del barrio, lo atraviesa horizontalmente.
La calle de Goya, a su vez, es atravesada por varias calles donde se encuentran diversas marcas de lujo. También hay multitud de bares, restaurantes y cafeterías que manejan todo tipo de precios y propuestas gastronómicas.
La densidad de población duplica con creces la del barrio de Recoletos, ya que, en una superficie similar, -realmente un poco más pequeña-, hay más espacio para viviendas. En el barrio de Goya viven
casi 30 mil personas, casi el doble de población que tiene el barrio de Recoletos.
Avenida de Felipe II
Entre las calles de Goya y Jorge Juan se encuentra la Avenida de Felipe II, un pequeño tramo peatonal en el céntrico Distrito de Salamanca que, hace de paseo y de plaza, y en el que confluyen la cultura y las costumbres de la vida madrileña.
A lo largo de esta ubicación comparten espacio el Palacio de los Deportes (antigua Plaza de Toros de Goya), un dolmen y la estatua de Newton de Salvador Dalí, obra que ha permitido al artista “adueñarse” de la plaza de manera oficiosa, siendo conocida como Plaza de Dalí desde su inauguración en 1986.
Bancos, árboles y esculturas salpican el suelo de la avenida, confiriéndole un aire distintivo que permite a paseantes y turistas disfrutar del corazón de Madrid. Pero no solo se trata de una zona de paseo u ocio, también es un emplazamiento que acoge actividades públicas, eventos y fiestas populares como las del propio distrito un año tras otro.
